Por la Ruta del Quijote

La Semana Santa del 2013 nos llevó a la Mancha, al corazón del universo de Don Quijote.

El inicio de esta ruta está en Argamasilla de Alba, desde donde salen dos itinerarios: Hacia el norte, a El Toboso, Campo de Criptana y Alcázar de San Juan. Hacia el sur, a las lagunas de Ruidera y la cueva de Montesinos.

Argamasilla de Alba es el "lugar de la Mancha" que Cervantes no quería recordar. Aquí se encuentra la Casa de Medrano, que según la tradición, es donde se encontraba el sótano donde sufrió prisión Miguel de Cervantes y donde empezó a escribir "Don Quijote de la Mancha". Los motivos por los que Cervantes estuvo en prisión no se conocen, aunque hay dos hipótesis: Una de ellas es que tuvo la osadía de cortejar con piropos a una moza del lugar que estaba emparentada con el cacique de la villa. Otra de ellas es que pretendió recaudar algunos diezmos del Priorato de la Orden de San Juan.
Además parece ser que aquí conoció al hidalgo "demente" Rodrigo Pacheco que lo habría tomado como modelo para su primer "boceto" del Quijote.

Casa de Medrano. Prisión de Cervantes

Casa de Medrano.
Prisión de Cervantes

Casa de Medrano.
Prisión de Cervantes

Otros puntos de interés en Argamasilla de Alba son el Canal del Gran Prior, que es la obra de canalización mas antigua realizada en el río Guadiana, cuya construcción data del siglo XIV, y la Iglesia de San Juan Bautista, del siglo XVI, en cuyo interior se puede ver el Cuadro Exvoto de Don Rodrigo de Pacheco fechado en 1601, donde aparece Don Rodrigo de Pacheco con ojos espantadizos y pelo largo, que según la tradición del lugar se identifica con Don Quijote, basándose en la fecha del mismo (cuatro años antes de la aparición de la primera parte del Quijote) y en el motivo de la enfermedad mental de Don Rodrigo Pacheco.

Tomando el itinerario norte, a unos 10 kilómetros de Argamasilla de Alba se encuentra Tomelloso, que conserva de la época cervantina la Posada de los Portales.

Posada de los Portales

Unos 50 kilómetros al norte se encuentra El Toboso, de gran trascendencia en la vida sentimental de Don Quijote. En la plaza Mayor, presidida por la iglesia de San Antonio Abad del siglo XVI, se recuerda el momento en que Don Quijote hincó su rodilla ante Dulcinea.

Iglesia de San Antonio Abad

Don Quijote hinca la rodilla ante Dulcinea

Cerca de allí se encuentra el Museo Casa de Dulcinea, situado en un edificio del siglo XVI, que conserva las características de la casa manchega de un hidalgo del siglo XVI, que en época cervantina fue habitada por don Esteban y su hermana doña Ana, quien inspiró el personaje de Dulcinea de El Toboso.
En la planta baja de la casa se encuentran la cocina, despensa, patios, corrales y palomares. En la parte superior se encuentran las estancias de la familia: Sala principal, entresala y alcobas.

Museo Casa de Dulcinea

Despensa

Cocina

Patio

Pozo

Almazara

Palomar

Aseo

Alcoba de Don Esteban

Estrado de Doña Ana

Estrado de Doña Ana

25 km al oeste se encuentra Campo de Criptana, en cuyo paraje conocido como la Sierra de los Molinos se inspiró Cervantes para la famosa aventura de Don Quijote con los molinos. Parece ser que en el siglo XVI en Campo de Criptana había 34 molinos, de los cuales se conservan 10 en la Sierra de los Molinos y el Cerro de la Paz. De ellos, 3 (Infanto, Sardinero y Burleta) conservan los mecanismos originales del siglo XVI y están considerados Bien de Interés Cultural. En el molino Culebro se encuentra el museo de Sara Montiel.

Sierra de Los Molinos

Sierra de los Molinos

Cerro de la Paz

Se conservan cuevas que servían de almacén y refugio de los molineros. En el Cerro de la Paz se encuentra la Casa Cueva de la Despensa, que se puede visitar.

Casa Cueva de la Despensa

Junto a los molinos hay varios sitios donde comer o tomar algo. Nosotros optamos por el restaurante la Cueva de la Martina, que ocupa una casa cueva del siglo XVI, con excelentes vistas de Campo de Criptana. ¡Comida manchega en un lugar inolvidable! Si vais, no olvidéis que estamos bajo tierra y la temperatura es fresquilla.

Restaurante la Cueva de Martina

Restaurante la Cueva de Martina

Restaurante la Cueva de Martina

Bajando a través de calles con casas bajas de paredes blancas con puertas y zócalos de color azul, conocido como el "Albaicín Criptano", se llega al centro de la localidad, donde destaca El Pósito del siglo XVI, que servía de almacén de grano.

Albaicín Criptano

Albaicín Criptano

El Pósito

A 15 km al oeste se encuentra Alcázar de San Juan, localidad de origen romano, cuyo nombre procede de la época de la presencia árabe (Al Kasahr, que significa "fortaleza"). En el siglo XII, durante la Reconquista llegó la Orden de San Juan, y un siglo después pasó a formar parte del Priorato de la Orden de San Juan, que cambió la vida social y económica de la ciudad. De esta época destacan el Torreón de don Juan José de Austria, núcleo de lo que fue el palacio de los grandes priores de Castilla y León de la Orden Hospitalaria de San Juan de Jerusalén, Rodas y Malta, el Cubillo, resto de la muralla que rodeaba la fortaleza árabe y la Iglesia de Santa María la Mayor.

Torreón de Don Juan José de Austria

Iglesia de Santa María la Mayor

En los siglos XVI y XVII la ciudad prosperó. De esta época son la Iglesia de San Francisco, el Convento de Santa Clara, la Iglesia de Santa Quiteria, el Convento de San José, la Iglesia de la Santísima Trinidad y la Casa del Hidalgo, donde se ha instalado un interesante museo que muestra como era la vida de los hidalgos que inspiraron a Cervantes para la creación de Don Quijote, y donde entre otras cosas te puedes probar una armadura ycomprobar si tienes fuerza suficiente para tensar una ballesta.

Iglesia de Santa Quiteria

Iglesia de la Santísima Trinidad

En la localidad existe la creencia de que Cervantes nació en Alcázar San Juan, basándose en la existencia de una partida de bautismo a nombre de un Miguel hijo de Blas Cervantes Saavedra, de fecha 9 de noviembre de 1558, en el libro bautismal de la Iglesia de Santa María la Mayor. La polémica esta servida con la versión oficial que indica que Cervantes nació en Alcalá de Henares.

En las afueras de Alcázar, en el cerro de San Antón se conservan 4 de los 19 molinos de viento y 2 de agua que tuvo la ciudad.

Molinos en el Cerro de San Antón

Molinos en el Cerro de San Antón

Para comer en Alcázar de San Juan fuimos al restaurante Casa Vicente, y ¡acertamos de pleno!. ¡Os lo recomendamos!.

En el itinerario de Argamasilla de Alba hacia el sur, a 12 km en dirección hacia las Lagunas de Ruidera se encuentra el Castillo de Peñarroya, situado en el borde de un precipicio sobre el río Alto Guadiana, junto al pantano y la presa de Peñarroya. En su interior se encuentra el Santuario de Nuestra Señora de la Encarnación.

Castillo de Pañarroya

Presa de Peñarroya

Continuando por la misma carretera, llegamos a Ruidera, y desde allí una carretera va bordeando las lagunas. El Parque Natural de las Lagunas de Ruidera está situado en el Alto Valle de Río Guadiana entre las provincias de Ciudad Real y Albacete, y está formado por 16 lagunas escalonadas, conectadas entre sí por cascadas y torrentes, que van desde los manantiales que emanan de la laguna Blanca hasta llegar a las lagunas bajas y al embalse de Peñarroya. Os aseguro que es un lugar sorprendente y espectacular, cuya frondosidad y exuberancia contrasta con la aridez de la zona que las rodea.

En el Parque, camino de Ossa de Montiel, se encuentra la Cueva de Montesinos, que según la tradición es la cueva en la que trascurren las aventuras del capítulo XXII y XXIII de la segunda parte de El Quijote. La cueva se visita de manera guiada, y para ello te equipan con casco y linterna. Nosotros no pudimos visitarla, ya que debíamos esperar bastante tiempo, así que otra vez será.

Cueva de Montesinos

Un poco mas adelante, a la izquierda sale un camino que nos lleva a las ruinas del Castillo de Rochafrida.

Castillo de Rochafrida

En otra entrada de este blog os contaré mas cosas de los Castillos de Peñarroya y Rochafrida.

Hasta aquí nuestra recorrido por tierras de Don Quijote. ¡Os lo recomiendo!
Espero que os haya gustado. ¡Hasta pronto!